lunes, 4 de julio de 2011

Manual para Escribir una Canción Romantica...

Requisitos: un corazón destrosado, los ojos cansados de llorar, el rostro lleno de lagrimas y en la boca un sabor amargo a derrota.

Comezamos por recordar los buenos momentos y seguimos llorando, despues vienen a nuestra mente los ultimos sucesos por los cuales sufrimos en ese momento, y aqui es donde comenzamos a escribir...

Con llanto en los ojos y el pulso tembloroso ponemos manos a la obra, las lagrimas caen sobre el papel, tristes y melancolicos deslizamos la pluma sobre el papel esperando que las cosas concuerden, buscamos un ritmo adecuado para que la tonada y letra combinen...

Continuamos esparciendo pedazos de corazon convertido en letras sobre el papel, aunado a un sentimiento de soledad y desesperación, esforzandonos por que al terminar el escrito sea del agrado de los demas y principalmente que llegue a la conciencia de la causante de nuestro sufrimiento...

Algunas veces, añorando el regreso y otras solo hacerle saber nuestro estado,(si es que a eso se le puede llamar asi), un poco confundidos repasamos el escrito y nos damos cuentas de las incoherencias escritas y comenzamos a buscar sinonimos para acomodar las palabras con lo que sentimos en ese momento: desolación, frustración, tristeza, desamor, impotencia, reencor, etc.

Ponemos alma cuerpo y corazón para escribir unas palabras que externen un sentimiento misogino hacia la causante de tanto dolor, sin tomar en cuenta que nosotros pusimos nuestro granito de arena en la "relación" para que llegara a esta situación (no aplica en todos los casos).

Terminamos por externar todo aquello sobre el papel y desahogandonos terminamos por ponerle una tonada linda a todo aquel emesis de sentimientos y asi culminar lo que llamamos una canción romantica.

En mi caso personal creo que he escrito una o dos...

1 comentario:

Celina Bigdance dijo...

Yo no he escrito ninguna, pues no tengo idea de cómo escribir música... pero si he hecho textos, cartas, poemas, narraciones y demás, y algunas veces, años después las leo y digo... "Dios, había olvidado lo triste que me veía cuando te fuiste"... pero no es que lo olvide, simplemente el alma se acostumbra a la ausencia y nos hace inmune al dolor.

Pero si, si juntara esos textos en un libro sería un manual para la depresión crónico degenerativa

Por eso no me leo mucho.